Diácono Nicolay Andreev nació en la ciudad de Zagorsk en 1964. En 1985 graduó del Collegio de Lenigrad, dónde recibió la profesión del fotógrafo. Después graduó del Seminario conciliar de Riga (Letonia) y el Instituto de Pedagogía Especial y Sicología de San Petersburgo (Rusia). En el mayo de 2011 graduó de la Facultad de reporteros fotógrafos de Galperin.
Diácono Nicolay Andreev ganó varios concursos de fotografía. También es el miembro de la Unión de fotógrafos de Rusia desde el año 2009. Las obras del autor se exponían en muchos lugares famosos de la ciudad, tales como el Museo Ruso, La Sala Central de Expociciones de San Petersburgo «Manezh», la Galería «Rajmaninov Dvorik», la Casa de Pintores, Regent Hall, la catedral de Nuestra Señora de Vladimir.
Diácono Nicolay lleva 30 años dedicando a la fotografía artística desde el mismo momento cuando sus padres le regalaron su primer aparato fotográfico «Smena».
La mayoria de las obras del autor están unidos por el tema de la peregrinación.
Los retratos de clérigos, parroquianos y cuadros de lugares sagrados, sin lujo y extremos emocionales, realizados con gran maestria, no van a impresionar con el espíritu innovador sino con la esencia de la imagen. La misma gama de colores de fotografías – negro y blanco – nos ayuda comprenderlo. En tales obras fotográficas siempre se puede ver los acentos en contornos y claroscuro.
Los imagines representados crean una serie de figuras claras que producen en nosotros los mejores sentidos y sonrisas.
Las escenas de género, los retratos sicológicos íntimos y paisajes – todo esto crea un conjunto que nos muestra la manera subjetiva del autor de ver las cosas y vida alrededor. En realidad, el mundo que ha visto el autor, es único. Y lo atractivo es que la vida y el destino del fotógrafo son muy vinculados con el tema principal de sus obras.
Las caras de personas imprimidas en fotografías de diácono Nicolay Andreev expresan no solamente la fe, sino la alegría.
Son las obras del hombre que mira tras el visor con los ojos de un sicólogo y un clérigo a la vez.
